Dejo un filamento de mis ojos debajo de tu almohada,
una leve esquirla
de mi mano izquierda
-Quizás algún día, cuando se terminen mis excusas,
toqué a tu puerta
y te pregunte:
"¿No dejé sobre la mesa
un pedazo de mis labios?"-
guardada en tu bolsillo:
Dejo, sin que te des cuenta,
fragmentos de mi
olvidados en tus cosas.
Dejo, sin que te des cuenta,
fragmentos de mi
olvidados en tus cosas.
-Quizás algún día, cuando se terminen mis excusas,
toqué a tu puerta
y te pregunte:
"¿No dejé sobre la mesa
un pedazo de mis labios?"-
2 comentarios:
me encantó... ME ENCANTÓ!!!
Qué increíble.
Publicar un comentario