martes, 13 de enero de 2009

Bloqueo mental

Después de todo la inspiración se resiste, siento que me estoy muriendo, como si las palabras se me amontonaran en el cuerpo, se me hinchan las venas de puntos y comas y estuviera estreñido de verbos. Mi vida se detiene mientras no escribo y me siento impotente en estas noches en que la pluma no es mi amante de siempre.

Les dejo en la compañía de un poema que llego a mi por medio de dos personas que aprecio mucho (Ofelia y Afhit) y una película de la cual me enamore instantáneamente. El lado oscuro del corazón me llevó a conocer a Oliverio Girondo poeta al cual desconocía, pero también a revalorar a un poeta de esos que se dan por sentado; todos conocemos a Mario Benedetti, no lo dudo, todos intentamos conquistar a alguien con táctica y estrategia y escuchamos a Serrat cantar te quiero pero fue hasta esta película que fui capaz de conocer un lado diferente de Benedetti, un lado que parece opacado por sus poemas exitosos y que a veces nos deslumbra con más fuerza.

ROSTRO DE VOS

Tengo una soledad 
tan concurrida 
tan llena de nostalgias 
y de rostros de vos 
de adioses hace tiempo 
y besos bienvenidos 
de primeras de cambio 
y de último vagón.

Tengo una soledad 
tan concurrida 
que puedo organizarla 
como una procesión 
por colores 
tamaños 
y promesas 
por época 
por tacto y por sabor.

Sin un temblor de más, 
me abrazo a tus ausencias 
que asisten y me asisten 
con mi rostro de vos.

Estoy lleno de sombras 
de noches y deseos 
de risas y de alguna maldición.

Mis huéspedes concurren, 
concurren como sueños 
con sus rencores nuevos 
su falta de candor. 
Yo les pongo una escoba 
tras la puerta 
porque quiero estar solo 
con mi rostro de vos.

Pero el rostro de vos 
mira a otra parte 
con sus ojos de amor 
que ya no aman 
como víveres 
que buscan a su hambre 
miran y miran 
y apagan la jornada.

Las paredes se van 
queda la noche 
las nostalgias se van 
no queda nada.

Ya mi rostro de vos 
cierra los ojos.

Y es una soledad 
tan desolada.

 

 

No hay comentarios: